Protesta, que algo queda

Protesta, que algo queda
marzo 4, 2011

El sindicalista Rubén González, condenado días atrás a más de siete años de cárcel, está desde ayer bajo libertad condicional. Las presiones ejercidas por el Movimiento Solidaridad Laboral, quienes plantearon paro general en protesta por la sentencia, parecen haber dado sus frutos. Sin embargo, al considerar que la libertad condicional no es suficiente, han decidido mantener la propuesta de paro hasta que la sentencia sea anulada. Se dijo que la orden de liberar a González “vino de arriba”. ¿Se estará volviendo blando el Gobierno? La expedita libertad condicional otorgada al sindicalista Rubén González ante la amenaza de una huelga general parece cuestionar la otrora capacidad del gobierno para hacer lo que le daba la gana sin ceder ante ninguna intimidación.

Con la huelga de hambre de los estudiantes frente a la OEA ocurrió más o menos lo mismo y, aunque les tomó más tiempo, lograron presionar lo suficiente para hacer ceder al gobierno. Es pronto para decir si todo esto se trata de una estrategia gubernamental para lavar su imagen o si, por el contrario, es el resultado de un debilitamiento de la base del poder que ostenta el Gobierno Revolucionario. Habrá de dar tiempo al tiempo, pero mientras tanto protesta, que algo queda.

En la liberación, no fue solo determinante la protesta laboral, sino además la intermediación del equipo legal y de los muchachos de la Operación Libertad.

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